Resiliencia hídrica. El agua en Tuxtla Gutiérrez: tan cerca y tan lejos, tan escasa y tan abundante
La escasez de agua es una de las amenazas que afronta actualmente la humanidad. Se estima que para el 2025 hasta 3,500 millones de personas a nivel mundial podrían sufrir por la falta de agua.
A pesar de que Chiapas es el estado en la República Mexicana con más agua, tres veces más que la media a nivel nacional y 10 veces más que la Baja California (el estado con menor precipitación media anual), existen localidades y comunidades donde el agua potable es escasa o a veces nula, a pesar que de que Tuxtla Gutiérrez es la capital del Estado y la precipitación media anual esta alrededor de los 2,000 mm, se tienen problemas de escasez y de altas tarifas de agua potable.
El agua en Tuxtla Gutiérrez está tan cerca y tan lejos, tenemos mucha y al mismo tiempo escasez del vital líquido que en ocasiones se convierte en fatal cuando sin control alguno escurre por las calles y avenidas, por los que los ríos arroyos han sido estrangulados y muchos de ellos desaparecidos por la mancha urbana.
Una gran parte del agua potable que se distribuye en la parte sur de la Ciudad de Tuxtla Gutiérrez, se tiene que bombear una distancia de más de 9 km, desde el río Santo Domingo y vencer una altura de más de 250 m, lo que aunado a equipos de bombeo ineficientes, provoca que el consumo de energía eléctrica sea excesivo en un estado que a pesar de que es el productor de la mayor parte de energía eléctrica del país, la tarifas de energía eléctrica siguen siendo elevadas, lo que encarece desmedidamente la conducción del vital líquido hasta la potabilizadora “Los Pájaros”.
La Meseta de Copoya o “Cerro de Agua”, todavía es una gran esponja del agua precipitada sobre su superficie, pero el acelerado y no planificado desarrollo urbano en dicha zona está provocando que el agua precipitada sobre áreas urbanizadas y en vías de urbanización escurra tres o cuatro veces más que en condiciones naturales, provocando inundaciones en las partes bajas de la zona urbana de Tuxtla Gutiérrez, lejos de garantizar la recarga de los mantos acuíferos.
Cuando llueve, cuando hay agua, no hay agua en Tuxtla Gutiérrez porque las respectivas potabilizadoras detienen sus operaciones por alta turbiedad en la fuente que en este caso son los ríos: Santo Domingo y Grijalva.
La principal fuente de agua la tenemos en Tuxtla Gutiérrez, literalmente a la vuelta de la esquina, a escasos 500 m desde la fuente hasta las primeras colonias ubicadas en la ladera sur de Tuxtla Gutiérrez, con la gran ventaja que no necesitamos bombear ya que viene bajando por gravedad desde la meseta de Copoya.
La Asociación Nacional de Profesionales en Resiliencia Delegación Chiapas propone las siguientes acciones:
1. Implementar un Sistema de Manejo y Control Integral del Agua en la Meseta de Copoya, así como en toda la ladera sur y norte de Tuxtla Gutiérrez, que incluya:
a. Estructuras de control de flujo aguas arriba, verdes y/o grises capaces de controlar y regular aproximadamente el 50% del gasto máximo.
b. Estructuras de control de erosión, a través de estructuras verdes o grises, capaces de detener el proceso erosivo provocado por el agua y el viento.
c. Subsistemas de infiltración, a través de áreas verdes, trincheras y pozos de infiltración.
d. Subsistemas de Detención, capaces de controlar y detener de manera temporal, el agua pluvial proveniente de las vialidades a través de parque urbanos.
e. Subsistemas de Retención, a través de exigir el cabal cumplimiento del Reglamento de Construcción en materia de Impacto Pluvial.
f. Subsistemas de humedales en la Meseta de Copoya, para controlar y purificar las aguas fluviales y pluviales que han arrastrado impurezas de las zonas urbanas.
2. Construcción de Galerías Filtrantes y casetas de cloración en la ladera sur y norte de Tuxtla Gutiérrez, para que se incorpore a la red de distribución de agua potable de la Ciudad de Tuxtla Gutiérrez.
 
			 
		