Willy Ochoa asegura que se entregaron reportes a instancias federales sobre la aparición de este grupo y su vinculación con disputas territoriales en municipios como Motozintla, La Concordia y Arriaga, pero que no recibió respuesta oportuna por parte del gobierno federal
Chiapas Observa/Staff.- El exgobernador provisional de Chiapas, Manuel Velasco Coello, denunció públicamente la presencia activa del grupo criminal “La Barredora” en distintos puntos del estado durante el gobierno de Rutilio Escandón Cadenas, particularmente en regiones limítrofes con Oaxaca y Guerrero. La declaración ha causado revuelo luego de que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) reconociera que no compartió esta información ni con el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador ni con el exsecretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández.
Willy Ochoa, por su parte, aseguró que se entregaron reportes a instancias federales sobre la aparición de este grupo y su vinculación con disputas territoriales en municipios como Motozintla, La Concordia y Arriaga, pero que no recibió respuesta oportuna por parte del gobierno federal.
El caso se da en un momento en que el nuevo gobierno federal busca reestructurar las políticas de seguridad nacional y evaluar el papel del Ejército en tareas civiles. La admisión de Sedena de que retuvo información clave en un momento de auge de la violencia criminal en el sureste mexicano podría alimentar el debate legislativo sobre transparencia militar, inteligencia civil y control democrático sobre las fuerzas armadas.
Además, la denuncia podría tener repercusiones jurídicas si se comprueba que la omisión derivó en una pérdida de vidas, desplazamientos forzados o violaciones a derechos humanos en comunidades chiapanecas donde operó “La Barredora”.
Lo que en apariencia es una disputa por datos del pasado, se ha convertido en un caso emblemático de cómo la opacidad en la estructura de seguridad nacional puede tener impactos reales en la vida de las personas.
