Denuncian también la devastación de universidades y la muerte de casi mil docentes desde el inicio de los ataques
Chiapas Observa/Staff.- Al menos 17,175 estudiantes palestinos han muerto y 118 escuelas han sido completamente destruidas desde el inicio de la ofensiva militar israelí en la Franja de Gaza, hace ya 21 meses, según cifras difundidas por el Ministerio de Sanidad palestino y publicadas por la agencia oficial Wafa.
La cifra de víctimas estudiantiles se eleva aún más con los más de 26,200 estudiantes heridos, lo que representa una de las tragedias educativas y humanitarias más graves registradas en la región en las últimas décadas.
En la Cisjordania ocupada, donde se encuentran ciudades como Yenín, Belén y Nablus, también se reporta una creciente represión: 140 estudiantes han sido asesinados desde octubre de 2023 y al menos 927 más han resultado heridos por fuego israelí, de acuerdo con el mismo reporte.
El impacto sobre el sector educativo va más allá de los alumnos. El Ministerio también denunció la muerte de 928 miembros del personal educativo, así como 4,452 heridos y 199 detenciones de docentes y personal administrativo en Cisjordania, bajo operaciones militares de las fuerzas israelíes.
Uno de los aspectos más alarmantes del informe es el ataque a escuelas administradas por la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA). Según los datos, 91 escuelas fueron bombardeadas o vandalizadas, pese a que muchas de ellas funcionaban como refugios para familias desplazadas.
Asimismo, el ministerio reportó la destrucción total de 60 edificios universitarios en la Franja de Gaza, un golpe severo al derecho a la educación superior para miles de jóvenes palestinos.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) advirtió en abril que un total de 564 centros educativos han sido dañados por los ataques en Gaza, y estimó que el 89% requerirá una reconstrucción total o significativa para poder reanudar sus funciones.
Las cifras dibujan un panorama devastador para el futuro de una generación entera. Organismos internacionales han expresado su alarma por el impacto irreversible de la guerra sobre el derecho a la educación, considerado un pilar fundamental de la estabilidad y la paz.
 
			 
		