El secretario de Seguridad y Tránsito Municipal de Tuxtla Gutiérrez, busca aplicar infracciones a los propios trabajadores de esta dependencia municipal, arrebatando los espacios en los que durante años se les permitía hacer uso, al no existir espacios destinados para que los policías y trabajadores administrativos puedan estacionarse mientras cumplen con sus horarios laborales
Chiapas Observa/Staff.- El secretario de Seguridad y Tránsito Municipal de Tuxtla Gutiérrez, Félix Noe Penagos Madrigal, enfrenta severas críticas no solo por sus prácticas corruptas que contradicen la política de Cero Impunidad, la cacería a conductores de la capital con la finalidad de acumular cobro de infracciones y los nulos resultados en el combate a delitos como el robo a comercio y transeúntes. Ahora sus propios policías lo acusan de prácticas arrogantes y violatorias a sus derechos, pues ha mandado a pintar de rojo y prohibir a los elementos municipales puedan estacionar sus vehículos y motocicletas a las afueras del cuartel general de esta corporación.
Penagos busca aplicar infracciones a los propios trabajadores de esta dependencia municipal, arrebatando los espacios en los que durante años se les permitía hacer uso, al no existir espacios destinados para que los policías y trabajadores administrativos puedan estacionarse mientras cumplen con sus horarios laborales.
Penagos Madrigal se ha ganado en cuestión de semanas el repudio de los tuxtlecos y de los propios policías que laboran en esta dependencia, pues el endurecimiento de las acciones en contra de conductores, no responde al supuesto pago del 40 por ciento de comisión por infracción para los elementos de Tránsito Municipal, sino a presiones ejercidas en contra de estos por parte de funcionarios de la Secretaría de Seguridad y Tránsito Municipal de Tuxtla Gutiérrez, esto se presume, por indicaciones del propio alcalde Ángel Torres.
A esto hay que agregar que Penagos Madrigal estaría brindando protección a particulares hospedados en un lujoso hotel ubicado al poniente de la ciudad, lugar en el que se enfrentan asignados elementos de la Policía Municipal y por lo cual, comandantes operativos se aproximan semana a semana para cobrar cuotas por estos servicios a personajes que ahí se hospedan.
«Penagos no tiene llenadera. Ahora nos arrebata el derecho a poder estacionarnos mientras cumplimos con nuestras labores, no tenemos más donde dejar nuestros medios de transporte, y además, busca despedir a compañeros que según él, presentan irregularidades sacadas de la manga como los exámenes de control y confianza que en la pasada administración tenían costo para ser aprobados», aseguran.